El compost permite retornar el potencial nutritivo a los suelos agrícolas, mejorar la capacidad de retención de agua y la estructura del suelo, combatir la erosión y, al mismo tiempo, disminuir la carga ambiental derivada de la disposición de dichos residuos. De este modo, el compost aporta macro y micronutrientes esenciales para el crecimiento de las plantas y favorece la fertilidad natural de los suelos, permitiendo una actividad agraria sustentable. En la Región del Biobío se generan cerca de 300.000 ton/año de residuos orgánicos domiciliarios biodegradables, lo que permitiría producir alrededor de 120.000 ton compost al año, con una cobertura potencial de 24.000 – 50.000 ha. Ello representa una interesante opción para el mejoramiento de los suelos agrícolas de la Región, caracterizados por insuficiencia hídrica, altos niveles de erosión y creciente pérdida de materia orgánica y de productividad de los cultivos.
A pesar de su gran potencial económico, ecológico y productivo, en nuestro país el aprovechamiento local de residuos orgánicos para producir compost se lleva a cabo mayoritariamente en pequeña escala, con insuficiente nivel tecnológico y bajos niveles de calidad. En este sentido, la comuna de Santa Juana cuenta desde 2016 con una “Planta Integrada de Manejo de Residuos Sólidos Domiciliarios” de propiedad municipal, la cual ha sido referente regional y nacional de una buena gestión de los residuos sólidos. Desgraciadamente, dadas sus características de funcionamiento sólo alcanza a cubrir al 30% de la población objetivo, produciendo 15 ton compost mensuales, de las
cuales 40% se entrega como incentivo a la población participante y 60% al Programa de Desarrollo de Acción Local del Ministerio de Agricultura y otras iniciativas de desarrollo rural, para uso en plantaciones e invernaderos para producción de hortalizas, donde las mujeres tienen una participación mayoritaria.
Este proyecto se enmarca en la Estrategia Nacional de Residuos Orgánicos que tiene como meta la valorización de 66% de los residuos orgánicos al 2040. Al respecto, se propone mejorar la base tecnológica y de gestión del proceso de compostaje de los residuos orgánicos de la comuna de Santa Juana, para lograr un producto de mayor calidad agronómica, que contribuya a alcanzar una mayor productividad de las actividades agrícolas y, al mismo tiempo, presente un mejor potencial de comercialización, abriendo así una opción de autofinanciamiento para este tipo de plantas, contribuyendo al desarrollo de una agricultura orgánica en la Región del Biobío.
El compostaje de residuos orgánicos domiciliarios para generar abono orgánico (compost) de uso productivo agrícola/forestal, representa la mejor opción en el contexto de una estrategia de economía circular, donde existe la oportunidad de fortalecer nuevas líneas de negocio mediante la valorización de los residuos y subproductos obtenidos en la cadena de producción, regeneración de suelos, promoción del desarrollo territorial y uso más eficiente de los recursos, entre otras.